Theodor (Binyamin Zeev) Herzl fue un periodista judío del Imperio Austrohúngaro, y se le considera el padre del movimiento político sionista.
Siendo corresponsal del periódico vienés Neue Freie Presse en París, Herzl fue testigo del juicio a Dreyfus, un oficial judío del ejército francés que fue injustamente acusado de traición. Herzl quedó horrorizado ante las multitudes parisinas que gritaban "¡Muerte a los judíos!". Estas experiencias, además de muchas otras manifestaciones antisemitas, lo llevaron a la conclusión de que los judíos debían tener un Estado propio. En 1896 publicó el libro revolucionario Der Judenstaat, y comenzó a trabajar sin cesar promoviendo la idea de un Estado nacional judío. Herzl falleció en 1904 sin llegar a ver sus ideas cumplidas.